El estiércol de las vacas posibilita la obtención de electricidad. Brian Fiscalni en su tambo de Modesto, en California (Estados Unidos), realiza con éxito el empleo de un digestor de metano con el que convierte el estiércol producido por sus vacas en electricidad. El mecanimo es sencillo: combinar estiércol con altos niveles de calor.

“Tenemos dos tanques que almacenan el estiércol de las vacas”, señala Brian Fiscalini según se publicó en el portal de alltech.com. Aquí la nota completa 👈.

“Calentamos esos tanques. Y si piensas en el calor y en las heces de las vacas juntos, vas a producir una gran cantidad de gas metano. Lo único que nosotros hacemos es capturar ese gas y canalizarlo a un motor. Ese motor convierte el gas metano en electricidad”, afirmó.

La electricidad producida en estos digestores de metano alimenta toda la energía que requiere el establecimiento lechero de Fiscalini para operar.

“La energía que producimos nos proporciona suficiente electricidad para hacer funcionar nuestra planta de queso, nuestra finca lechera y además tenemos también un sobrante de energía que alimenta a unos 300 hogares de la comunidad”, señala Brian Fiscalini.

Además de estos sorprendentes beneficios, en los 10 años desde que se instalaron por primera vez, los digestores de metano han permitido que la operación Fiscalini reduzca su uso de propano en alrededor de un 70%.

Buenos Aires, 29 de octubre de 2019