En 2022, las exportaciones totales de Argentina serán de 87.182 millones de dólares, lo que representa un incremento interanual de 11%, de acuerdo a proyecciones de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).

De ese total, el complejo agroexportador aportará u$s 41.500 millones, a partir de la revalorización en los precios internacionales de maíz, soja y girasol.

De esta manera, podría encadenarse el segundo año de crecimiento consecutivo de las exportaciones en valor, al pasar de u$s 54.884 millones en 2020 a u$s 78.092 millones el año pasado y a más de u$s 87.000 millones en estos doce meses. En el caso de los despachos del agro, corresponden a las principales cadenas granarias como la de soja, maíz, trigo, cebada, girasol y sorgo. El mayor peso en las ventas recae sobre los subproductos sojeros, como harina y aceite.

En relación a 2021, representa un salto de u$s 3.450 millones. Al compás del incremento de los valores exportables, detalló la BCR, durante los primeros tres meses del año los principales complejos agro despacharon casi 23,5 millones de toneladas, un volumen que se encuentra un 14% por encima del tonelaje exportado en el mismo período del año pasado.

Si bien la suba de los precios permite engrosar el ingreso de dólares, esta mejora también representa un problema en la balanza comercial argentina, «Las alzas en los precios internacionales de una gran variedad de commodities también alcanzaron a varios productos que la Argentina importa», indicaron desde la BCR. De este manera, en el primer trimestre del año, mientras los precios de exportación crecieron casi un 26%, los precios de las importaciones mostraron un alza superior, que alcanzó el 39%.