El consumo de leche refriguerada en Brasil presentó un aumento del 0,6% interanual al cuatro trimestre de 2020, según datos preliminares de la Encuesta Trimestral de Leche del IBGE (Instituto Brasileño de Geografía y Estadística).
Así lo refirió el último informe del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA), en base a datos aportados por el portal MilkPoint, donde se indicó que estacionalmente, los 6.700 millones de litros capturados entre octubre, noviembre y diciembre de 2020 son un 4,1% más altos que en el tercer trimestre de 2020.
Este “estancamiento” de la producción a fines de 2020 no sorprende, ya que, a pesar del alto precio del concentrado (maíz y soja), el indicador RMCR (Ingresos menos costo de alimento) indicó valores muy altos para el productor en el período.
Posiblemente este bajo incremento en la producción fue el resultado de algunos factores en conjunto, como problemas climáticos (falta de lluvias) principalmente en el sur del país (afectando la producción allí de manera más drástica) y en importantes regiones productivas en Minas Gerais y Goiás; y debido también a la menor cantidad de vacas ordeñadas, consecuencia de la desventajosa relación de la leche con respecto a la carne de res observada desde principios de 2020.
Siguiendo esta tendencia, la producción ahora a principios de 2021 debería tener una tasa de crecimiento más lenta, principalmente después de sucesivas caídas de precios en el campo. Por otro lado, recordemos los altos volúmenes de importación que aún están ingresando al mercado brasileño y la demanda, que se encuentra estancada desde el segundo semestre del año y a la espera del nuevo “bono corona” señalado desde marzo por el gobierno federal. La ecuación del mercado este año no es fácil de explicar.
Buenos Aires, 19 de febrero de 2021