El Gobierno bonaerense habilitó el ingreso de declaraciones juradas para productores afectados por sequía. La medida, que se anunció tras una reunión de la Comisión de Emergencia y Desastre Agropecuario de la Provincia de Buenos Aires (Cedaba), beneficiará 32 localidades de la provincia y se extenderá hasta el 31 de diciembre de este año.

En el encuentro, también se resolvió llevar a cabo capacitaciones para los secretarios de producción de los municipios y a representantes de entidades rurales, sobre cómo completar las declaraciones juradas. De esta manera, apuntan a agilizar el proceso para los productores.

El secretario de Agricultura, Juan Bahillo, admitió que las lluvias que cayeron en distintas zonas agropecuarias durante los últimos días «no van a poder reparar los daños» que dejó la sequía, sobre todo en las hectáreas sembradas con trigo.

«La lluvia ayudó pero llegó un poco tarde. En el trigo, por ejemplo, hay daños que ya no se van a poder reparar«, enfatizó el funcionario.

Recientemente, Bahillo había estimado que la producción de trigo rondará las 16 millones de toneladas este año, un volumen que, a su criterio, permitirá abastecer al mercado interno y cumplir con las exportaciones.

La ley establece que aquellos productores que hayan visto afectado entre el 50% y el 79% de su producción, serán considerados en estado de Emergencia Agropecuaria. A ellos se les otorgará una prórroga del pago del impuesto Inmobiliario Rural, correspondiente al inmueble destinado al desarrollo de la actividad agropecuaria.

En tanto, aquellos que hayan sufrido una afectación de entre el 80% y 100% de su producción entran en la categoría de Desastre Agropecuario y serán eximidos del pago del impuesto rural, en proporción al porcentaje de la afectación de la explotación.

Buenos Aires, 16 de noviembre de 2022