En Nueva Zelanda, el sector productor de leche bovina apuesta a la creación de 1.000 nuevos empleos, los necesita urgente, para apostar a «al bienestar» del principal bien que tiene el tambero, sus vacas lecheras.

Según publicó el portal NZHerald.com, en una nota firmada por Amelia Wade, los ganaderos, y también agricultores neozelandeses, aseguran que el sector se está precipitando hacia una crisis de escasez de trabajadores al borde de la temporada de partos con más de 1000 vacantes en el sector lácteo.

Estiman que el Gobierno debe proporcionar decisiones y medidas rápidas en lo que respecta a acelerar las extensión de visa a extranjeros y permitir que los trabajadores clave atrapados por la pandemia en el extranjero vuelvan a Nueva Zelanda, explicó DairyNZ, gremial ruralista que representa a los productores neozelandeses de lácteos.

El presidente de la entidad, Tim Mackle, expresó que si no se abordaba el problema de la escasez de trabajadores, podría poner en peligro el bienestar animal.

DairyNZ estaba listo para comenzar un programa de capacitación para redistribuir a las personas  desempleadas en los tambos, pero eso no sucedería lo suficientemente rápido para la temporada de parto que comienza en julio.

Según los tamberos, el cuidado de los animales, el bienestar humano, los problemas ambientales y la productividad del sector lácteo están en juego con la escasez de trabajadores. «Realmente -dijo- queremos desempeñar nuestro papel y hacer que más kiwis encuentren empleo y que tengan más kiwis en los lácteos. Nos encantaría. Pero el desafío es que no puede suceder con solo pulsar un botón».

Mackle estimó que había alrededor de 5.000 migrantes trabajando en el sector lácteo y que sin la entrada de otros trabajadores: «el Gobierno de Nueva Zelanda debe aportar certeza sobre las extensiones de visas». En medio de la crisis de Covid-19, todas las visas de trabajo se extendieron hasta septiembre, pero Mackle dijo que eso significaba que muchos tendrían que irse «justo en el medio» antes de la primavera.

Para los productores en esta parte de Oceanía, falta mano de obra en el campo neozelandes, por tanto ese millar de empleos deberían ocuparse ahora, sabiendo que la industria láctea en el país duplicó su tamaño en la última década.

Aquí la nota completa

https://www.nzherald.co.nz/nz/news/article.cfm?c_id=1&objectid=12335334

Buenos Aires, 28 de mayo de 2020