En Estados Unidos, tamberos del estado de Wisconsin tiran cerca de 100.000 litros de leche diarios por la imposibilidad de procesarlos en las plantas ni colocarlos en el mercado lácteo: la economía láctea ya era frágil y sus problemas se aceleran con el coronavirus. Aquí la nota completa
La caída en el consumo está dado por el cierra de restaurantes, escuelas, hoteles y locales de venta de alimentos.
Días atrás, tras recibir un llamado desde las usina láctea encargada habitualmente de recolectar su producción, en la granja conocida como West Bend, en el estado norteamericano de Wisconsin, la familia encargada del tambo decidió abrir sus válvulas para dejar correr su leche hasta el desague. Miles de litros tirados por Ryan Elbe, a cargo hoy del tambo que fundaron sus padres en 1991 con un rodeo de 80 lecheras y donde hoy tiene en ordeñe a unas 2.400 vacas.
Según explicó Elbe a la prensa: «pensamos que esto nunca sucedería. En Estados Unidos, todos corren a los comercios de alimentos a comprar comida, y hoy tenemos comida que literalmente tenemos que tirar al desague».
Cooperativa láctea en Wisconsin insta a sus proveedores a dejar la actividad
La crisis por la falta de precio y mercado se hace sentir más que nunca en las verdes praderas de Estados Unidos, en las principales zonas lecheras del país, donde la cooperativa Ellsworth Cooperative Creamery está alentando a los miembros a «abandonar» la industria lechera.
Una carta obtenida por Canal de Noticias Siete enviada a los miembros de la cooperativa Ellsworth, donde los alienta a sus productores de leche a abandonar la industria. (Foto de WSAW, 3/4/2020)
En la misiva enviada por la cooperativa láctea en Wisconsin a sus tambos proveedores se indicó:
«La junta directiva ha aprobado el siguiente programa para alentar a los miembros a abandonar la producción lechera mediante el pago de la equidad en la cooperativa para los años 2010 a 2019, siempre que el miembro cumpla con los siguientes criterios»:
El criterio que los miembros deben cumplir, indicados en la carta, plantea que el programa de ajuste es solo para los primeros que proveen 50 mil litros de leche por día de leche: los miembros no deben vender sus vacas a un miembro existente de la cooperativa; también deben proporcionar prueba de dónde fueron las vacas a la junta directiva; las vacas deben venderse antes del 15 de abril y los miembros no podrán enviar de vuelta a la cooperativa sin la aprobación de la junta.
«Sabemos que tenemos agricultores que no están seguros de si van a abandonar la agricultura este año o el próximo», explicó Paul Bauer, de la Cooperativa Creamery de Ellsworth. «Sentimos que esta era una manera de incentivar a nuestros agricultores a abandonar el negocio, quizás un poco antes de lo que esperaban, para mejorar la base de clientes», se indicó en la carta.
Buenos Aires, 5 de abril de 2020
