A cuenta de datos aportados por el Observatorio de la Cadena Lácte Argentina (OCLA), «cabe mencionar que en los dos años anteriores se dio un crecimiento algo superior al 1% en cada año».

Los países evaluados representan el 60% de la producción mundial de leche de vaca: Argentina experimentó en enero-noviembre de 2019 una caída interanual del 2,3% en la obtención de leche.

Australia por efecto de una fuerte sequía caería un 7,3% y Uruguay experimentaría una merma del 4% en igual lapso. Mientras que los 28 países que integran la Unión Europea experimentarán un alza del 0,5% en la producción de leche y Estados Unidos un aumento del 0,3%, hay casos como el de Brasil y México, que van a exhibir un incremento del 3,4% y 2,3% respectivamente.

«El  comportamiento de la producción ponderada de ambos hemisferios teniendo en cuenta los países exportadores, marca una mejor perfomance para el hemisferio norte respecto al hemisferio sur», según refirió el portal CLAL de Italia.

Se indicó además que la producción mundial de leche de vaca totaliza unos 703,7 millones de toneladas de leche en 2018 (WDS 2019 FIL/IDF), de los cuales se comercializaron en el mercado mundial el 11,1% (si no consideramos las ventas intra Unión Europea).

La producción mundial de leche de vaca viene creciendo a una tasa del 2,0% entre los años 2000 y 2018, con estos datos se deduce que la tasa se desaceleró en 2019 y es probable que se mantenga esa desaceleración en 2020 (crecimiento estimado del 1% para el año).

«Esta menor presión de oferta actual, aún no se visualiza en los precios internacionales actuales ni tampoco en los valores de los precios futuros, salvo para el caso de la leche en polvo descremada que ha crecido significativamente productos de la eliminación de los altos stocks de la Unión Europea», se indicó.

Buenos Aires, 16 de enero de 2020