Durante el próximo invierno, del efecto Niño se pasará a una Niña de cara a la próxima primavera y a más tardar durante el verano del 2025.
Según Meteored, las lluvias serán normales a deficitarias a partir del mes de mayo, mientras que las temperaturas se normalizarán en la última mitad del otoño.
Marzo fue un mes intenso desde el punto de vista meteorológico: eventos de precipitaciones intensas al este del país, déficit de lluvias sobre el norte; temperaturas muy por encima de lo normal en el norte argentino, eventos de tiempo severo con granizo destructivo y vientos feroces en diferentes zonas.
Si bien el Niño sigue activo, ejerciendo influencia sobre la tendencia de precipitaciones en nuestro país, aunque está perdiendo fuerzas lentamente. El pronóstico hasta abril indica que no tendría una notoria influencia en los patrones regionales durante gran parte del mes, salvo a finales de abril donde favorecería las precipitaciones entre el norte de Buenos Aires y el nordeste argentino.
Buenos Aires, 3 de marzo de 2024