El momento del destete es un punto clave para la sanidad de las recrías, pero hay que entender que la sanidad de la recría no debería iniciar en el destete mismo sino unos meses antes, así lo indicó el médico veterinario Ignacio Alvarez.

Hay un concepto que se denomina preacondicionamiento que se trata de una estrategia y un manejo sanitario que se hace con mucha frecuencia en algunos países, principalmente en aquellos que envían los terneros al feedlot.

Toma tanta importancia este preacondicionamiento que los terneros que son preacondicionados valen más al momento de la venta. Creo que es algo que se debería empezar a hacer y exigir con más frecuencia en el mercado de compra y venta de terneros.

¿En qué consiste? En que todos los trabajos de vacunación, castración, marca, destete, caravaneo, se realicen entre los tres y cinco meses de la edad del ternero, evitando así que a los veinte días previos a la venta de la hacienda haya que hacer alguna maniobra estresante con el animal que repercuta en la sanidad de la recría.

Entonces, tal como publicó el portal Infosudoeste, de esta forma el comprador se asegura que recibe un ternero solamente con el stress generado por el viaje y con todas las vacunas correspondientes.

Esto se puede llevar perfectamente al momento del destete. Si nos gusta trabajar con la ganadería, me parece que hay que encerrar. No tratemos de marcar, castrar o vacunar en solo un día de encierro y encima después exigir que las vacunas funcionen. Creo que primero se debería arrancar con esta idea.

Después, en cuanto al punto de vista sanitario, como plan sanitario básico tenemos que tener doble dosis de vacuna respiratoria y de clostridial en los terneros entre los tres y cinco meses. Independientemente de quedarnos con ellos o vendiéndolos.

Debemos tratar de entregar el mejor producto posible, con la mejor sanidad posible. Entonces, si se nos complica el encierro con terneros de dos meses y no tenemos las pariciones muy centralizadas en tiempo, hacemos un encierro a los cuatro o cinco meses y a los veintiún días volvemos a encerrar.

Y acá se da la importancia de la doble dosis, no sirve de nada dar una sola dosis tanto de enfermedad respiratoria como de enfermedad clostridial. Hay una cuestión inmunológica que la estamos viendo ahora con el Coronavirus y se trata de la famosa doble dosis a los veintiún días. Es importante mantenerla y respetarla para que realmente la vacuna pueda cumplir con sus objetivos.

Ahora bien, ¿las vacunas son milagrosas? No, las vacunas van a ayudar un poco. Especialmente en Argentina la vacuna respiratoria es una vacuna muerta a diferencia de otros países donde son vacunas vivas. Entonces, la cobertura que tiene es un poco más corta, por eso es tan importante el tema de la doble dosis.

¿Qué diferencia habría entre un lote que tiene neumonía si está o no vacunado? Básicamente que el que no está vacunado de 100 terneros se nos van a enfermar veinte y se van a morir quince. Y si ese lote está vacunado, en vez de enfermarse veinte, se van a enfermar diez y de esos diez se van a morir cinco.

Es un ejemplo muy burdo, pero es para que quede claro que las vacunas no son milagrosas, pero sí se va a bajar muchísimo la incidencia de la enfermedad y de la muerte.

Entonces, desde el punto de vista sanitario, estas dos vacunas, clostridial y respiratoria, tienen que ir sí o sí.

Otro tema importante en el momento del destete es la desparasitación. Este es un momento muy transcendental, hay que hacerlo en forma de calendario y lo más estratégico posible. Tenemos que tratar de ver si esos animales están viniendo con una carga muy alta y a qué potreros van a ir.

Si realmente podemos evaluar estas condiciones, tal vez no sea necesario la desparasitación en el momento del destete y hasta la podríamos llegar a correr un mes más con re chequeo de HPG.

Para cerrar, otra cuestión importante es el tema de la resistencia y evitar el uso de ivermectinas al momento del destete. Se podría utilizar levamisol como antiparasitario.

El tema de los parásitos es más que nada control, monitoreo e ir evaluando la situación epidemiológica de los potreros, el clima y los animales.

Buenos Aires, 20 de marzo de 2021