
La estabilidad en los precios que reporta el mercado lácteo mundial podría atribuirse, tal como lo indican informes del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina, al crecimiento limitado que exhiba la leche. Allí surge la pregunta: ¿Se podrá mantener?
Los especialistas del OCLA admiten que «todo dependerá de cómo evolucione la producción de leche. En el Hemisferio Sur, la situación en Argentina y Australia está condicionada por la continua presión en los márgenes de los ganaderos por la sequía: motivo por lo cual es descartable cualquier aumento».
«Sería solo Nueva Zelanda la que podría incrementar su producción, según Agriculture and Horticulture Development Board (AHDB) del Reino Unido. Las estimaciones sugieren un aumento del 0,5% en la producción láctea neocelandesa para la actual campaña 2019-20. Durante los dos primeros meses, la producción se ha incrementado en un 8,7%. Hay una buena previsión de temperaturas, lluvias y de disponibilidad de pastos», se indicó.
Según la OCLA, «a nivel de la Unión Europea, el mercado de los lácteos industriales parece equilibrado, de acuerdo a lo expresado por la entidad interprofesional francesa CNIEL, esto debido a una producción doméstica estable. El precio de la manteca está sometido a mucho menos presión que en el 2017 y 201,8, mientras que la leche descremada en polvo se recupera gradualmente y se aleja del umbral de intervención».
También se comentó que en el último informe del Observatorio Lácteo Europeo, el precio de la manteca está en 3,67 euros por kilo, un 16% menos que la media alcanzada en los últimos cinco años. El valor de la leche en polvo descremada es un 2,9% más alto que la media de las últimas cuatro semanas y un 25% por arriba del precio que se alcanzó a principios de 2019.
Buenos Aires, 24 de septiembre de 2019