En la Bolsa de Chicago, el maíz acusó al cierre de la última semana un impacto bajista, con quitas mayores al 6%, mientras que la soja perdió un 2% de su valor en Chicago. En el mercado local las mayores pérdidas también las padecieron el trigo nuevo y el maíz.
Negativa resultó la semana para los precios del maíz en el mercado argentino de granos, con una transición de las propuestas de los exportadores de 275 a 265 dólares por tonelada (de 32.821 a 31.927 pesos) para el Gran Rosario; de 290 a 277 dólares (de 34.612 a 33.373 pesos) para Bahía Blanca, y de 290 a 270 dólares por tonelada para Necochea.
Para el viernes el FAS teórico del maíz fue calculado por Agricultura en $ 30.304, mientras que para el inicio de la semana comercial fue fijado en $ 29.950. El valor FOB del maíz en los puertos argentinos pasó de 323 a 301 dólares por tonelada.
Con importantes pérdidas cerró la semana del maíz en el Matba Rofex, donde los ajustes de las posiciones julio y septiembre cayeron un 5,79 y un 5,88%, luego de pasar de 267,50 a 252 y de 270,50 a 254,60 dólares por tonelada. Pensando en la próxima campaña, el contrato abril perdió un 5,75%, al variar de 252 a 237,50 dólares por tonelada.
En su informe semanal sobre carga de buques programada para el período del 1º de junio al 7 de julio, la BCR marcó que deben salir del Gran Rosario 1.203.100 toneladas de maíz; desde Bahía Blanca, 616.500 toneladas; desde Necochea, 70.920 toneladas, y desde otros puertos, 35.000 toneladas.
Respecto de los cultivos, el jueves la BCBA relevó el avance de la cosecha de maíz argentino sobre el 32% del área apta, frente al 34,1% de 2021 y al 42,2% promedio de los cinco años precedentes. «A la fecha, el rinde medio nacional se ubica en 68,6 quintales por hectárea, 0,4 quintales por sobre el valor registrado la semana anterior. Frente a este panorama, mantenemos nuestra actual proyección de producción en 49 millones de toneladas», dijo la entidad.
Fue muy negativa la semana de negocios para los precios del maíz en Chicago, donde los contratos julio y septiembre perdieron un 6,46 y un 5,84%, al pasar de 305,99 a 286,21 y de 293,19 a 276,07 dólares por tonelada. El cereal fue afectado por el movimiento de ventas de los especuladores, que si bien tuvo su epicentro en el mercado de trigo, afectó los cimientos del maíz por la chance de que finalmente se encuentre algún acuerdo para liberar de Ucrania por vía marítima los granos retenidos desde el inicio de la guerra (como se amplía en el espacio del trigo). Además, buenas condiciones meteorológicas sobre zonas agrícolas estadounidenses donde más lenta venía la siembra aportaron a la tónica bajista del grano grueso.
Sobre esto último cabe recordar que el martes el USDA relevó el avance de la siembra de maíz sobre el 86% del área prevista, frente al 72% de la semana anterior, al 94% de igual momento de 2021 y al 87% promedio de las cuatro campañas anteriores. El dato oficial superó el 85% previsto en promedio por los operadores. El mayor atraso de las labores el organismo lo marcó sobre Dakota del Norte, con un progreso sobre el 56% del área, contra el 92% de 2021 y el 83% promedio. Justamente sobre ese Estado se habrían concentrado las tareas durante la semana, gracias a las mejores condiciones climáticas.
Tampoco fue alentador para el mercado el reporte semanal sobre las exportaciones estadounidenses, en particular sobre el nuevo ciclo comercial. En efecto, el viernes el USDA relevó ventas de maíz 2021/2022 por 185.800 toneladas, por encima de las 151.600 toneladas del trabajo anterior y dentro del rango previsto por los privados, de 125.000 a 400.000 toneladas. Los negocios 2022/2023 fueron reportados en sólo 48.700 toneladas, debajo de las 58.300 toneladas de la semana pasada y del rango estimado por los operadores, de entre 100.000 y 300.000 toneladas.
Algo de alivio y sostén aportó el jueves el reporte semanal de la Administración de Información sobre Energía de Estados Unidos, dado que elevó de 1.014.000 a 1.071.000 barriles la producción de etanol, un volumen que resultó el más alto desde la segunda semana de diciembre de 2021 y que quedó por encima de los 1.034.000 barriles de igual momento de 2021. Además, gracias al incremento del consumo, redujo las existencias de etanol de 23.712.000 a 22.961.000 barriles, el volumen más bajo del año, pero que todavía se ubica muy por encima de los 19.588.000 barriles vigente a igual fecha de 2021.
Como se indicó en el espacio de la soja, el viernes la Agencia de Protección Ambiental estadounidense resolvió negar exenciones pendientes de resolución a refinadoras de petróleo, mientras que mantuvo sin cambio respecto de lo propuesto en diciembre sus requerimientos de corte obligatorio de 2020; elevó en modo retroactivo los de 2021, y redujo levemente los de 2022. Todo bastante en línea con lo previsto por los operadores en las jornadas previas.
El avance de la segunda cosecha en Brasil fue –y lo continuará siendo en las próximas semanas– otro de los factores de presión bajista sobre los precios del maíz en Chicago, dado que en breve comenzará a volcar un importante volumen de grano sobre el circuito comercial. Cabe recordar que esta segunda cosecha es la que aporta cerca del 75% de la producción total del cereal brasileño. El lunes pasado la Conab reportó su progreso sobre el 0,6%, respecto del 0,2% del informe anterior y del 0,3% de igual momento del año pasado. El viernes, el Instituto Mato-Grossense de Economía Agrícola relevó el avance de la segunda cosecha de maíz en Mato Grosso sobre el 5,98% del área apta, frente al 0,38% de igual momento de 2021 y al 0,58% promedio de los últimos cinco años.
El miércoles StoneX elevó de 116,50 a 116,80 millones de toneladas su estimación sobre el volumen total de la producción de maíz en Brasil. En el caso particular de la segunda cosecha, la incrementó de 88,10 a 88,30 millones de toneladas. En mayo el USDA proyectó la producción brasileña de maíz en 116 millones de toneladas.
También el miércoles, la Asociación de Productores de Granos de Ucrania estimó en 26,10 millones de toneladas el volumen de la cosecha de maíz 2022/2023, por encima de los 23,10 millones proyectados en abril, pero debajo de los 37,60 millones de toneladas de la campaña anterior. En cuanto a las exportaciones, las calculó en torno de los 15 millones de toneladas. En su informe de mayo el USDA calculó la producción y las ventas ucranianas en 19,50 y en 9 millones de toneladas, respectivamente.
Buenos Aires, 5 de junio de 2022